lunes, 1 de octubre de 2007

Para ti, que te odio tanto; para mí, que me miento tanto.



Voy a contar los segundos en que no te quiero.
Voy a guardarlos en una caja.
Voy a envolverlos en papel de regalo.
Voy a perfumarlos una vez envueltos.
Esos segundos van a ser tuyos.
Segundos en los que pienso que no vale la pena amarte.
En los que respiro sin tus pulmones.
Segundos propicios para tirar la toalla.
Segundos propicios para dejar de soñar.
Segundos propicios para llorar descansada.
Segundos propicios para volver a empezar.
Voy a mirarlos de frente.
Voy a mirarlos de reojo.
Voy a escupir en ellos.
Voy a romperlos, rasgarlos, pegar los trocitos.
Quiero que los tengas tú.
Demostrarte que no siempre pienso en ti.
Demostrarme que no siempre soy tuya.
Demostrarte que la rabia me gana
Cuando el amor no es suficiente.
Todos esos segundos en que no te quiero
Van a ser para ti mi obsequio.
Aquí los tienes.
Mi nada es el precio.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
He ganado sin haber perdido.
He perdido aunque he ganado.
Me desperté
Pero no por la mañana.
Me desperté a medianoche.
No sabía quién era
Ni de quién las pesadillas.
Salí a buscarte en las estrellas
Camuflada y escondida.
Tú pensabas que te rogaría
Que fueses mío.
Por eso huiste.
Pero si yo sólo quería
Conocerme y encontrarme.
Nunca te hubiese pedido la luna.
Creo que está más bonita ahí arriba.
Sólo te habría cogido del brazo
Para observarte con miedo a tocarte.
No hubiera forzado el beso.
No hubiera pedido el abrazo.
No hubiera sonreído siquiera.
No he vuelto a dormir desde entonces.
Busco la absurda manera
De hacerte entender lo que digo.

No hay comentarios: