miércoles, 21 de mayo de 2008

¿Vivir para contarlo? Vivir para contarTE


Vivir para vivirte y explicarte todas esas cosas que no has presenciado por encontrarte lejos.
Tan lejos como dos centímetros en el sofá o cuatro en la cama.
Necesito esquematizar mi discurso, asegurarme de que no voy a dejarme nada en el tintero ni en las uñas, escondiendo mis soles porque demasiada luz es tan molesta o más que la oscuridad.
Contarte cuentos. Los cuentos que nos llevarán a odiar esa infancia sin tenernos.
La fantasía, lo inmediato y la magia que caduca irremediablemente.
Presentaciones de miedos educados que se saludan e intercambian impresiones en una sala tapizada de color azul.
Enmascarando nuestras diferencias por no llegar a un acuerdo.
Al fin, después de mil divagaciones, durante dos mil reflexiones y antes de tres mil dolores de cabeza, sólo quiero proponerte algo tan decente como indecente...
Si nos contamos, si somos palabras, vamos a ser carne.
¿Nos vivimos?

1 comentario:

Miguel dijo...

Preciosa declaración de intenciones.